La Comandancia de la Guardia Civil de Palma recomendó ayer que los particulares «adopten medidas de prevención y de autoprotección» ante la oleada de asaltos a casas habitadas de Mallorca, en especial en la Part Forana. Además, la Benemérita ha reforzado la vigilancia en los pueblos -sobre todo en zonas aisladas- y ha incrementado los controles en las carreteras.
Tal y como adelantamos en dias pasados, el domingo de madrugada una mujer de mediana edad fue atada en su casa de Cas Català (Calvià) por tres delincuentes armados con unas tijeras de poda. El asalto se produjo en un edificio de la calle Barranc, una zona habitualmente tranquila. Según la versión de la víctima, los delincuentes le obligaron a decir donde escondía el dinero y las joyas y se llevaron un botín valorado en más de 18.000 euros. A ella la dejaron atada a una silla con cinta aislante, en una de las habitaciones. Horas antes, otra banda asaltó a la familia de un joyero de Santa Maria, a la que encañonaron y obtivieron también un importante botín.
Los últimos atracos en casas habitadas han causado cierta alarma en Mallorca y ayer el portavoz de la Comandancia recomendó una serie de medidas para extremar la prevención: cerrar bien puertas y ventanas, no abrir la puerta a desconocidos, y colaborar con las fuerzas de seguridad si ven a coches o personas sospechosas (llamando al 062, el teléfono de la Guardia Civil). La otra medida adoptada por la Comandancia ha sido reforzar con patrullas de la USECIC (Unidad de Seguridad Ciudadana) la vigilancia en zonas aisladas de la Part Forana. También se ha decidido incrementar los controles en rotondas y carreteras, para tratar de cazar a los delincuentes cuando se mueven por las noches.
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