La Fiscalía de Valencia ha solicitado dieciséis meses de prisión para la Vigilante de Seguridad de un Hospital de Manises que se apropió de los efectos personales de un hombre que falleció durante su estancia en el mismo. La acusada Claudia P.E., aseguró en el acto del Juicio que le entregó los efectos al personal de la funeraria tras identificarse con una placa. Un testigo perteneciente a la empresa funeraria descartó esa posibilidad, ya que los objetos personales solo se entregan a las familias y existen tales placas identificativas.
El hijo del fallecido aseguró que cuando reclamó las pertenencias de su padre, un Vigilante de Seguridad le aseguró que se las había dado a un familiar. Cuando le solicitó un justificante de la entrega, asegura que le pusieron pegas. Cuando finalmente consiguió la entrega del justificante, en el mismo se indicaba que los objetos personales habían sido entregados al personal de la funeraria. El testigo declaró que su padre vivía solo en Quart de Poblet y que a él no lo localizaron hasta varias horas después del fallecimiento.
Un Vigilante de Seguridad, compañero de la acusada, confirmó en el juicio oral que los efectos personales solo pueden entregarse a los familiares tras haber sido debidamente identificados. El personal de la funeraria insistió en que nunca recogen efectos de los fallecidos y que nunca se identifican con placas. El abogado defensor solicitó la libre absolución de la acusada. El Fiscal solicitó un agravante de la pena por abuso de confianza, elevando a dieciséis meses la petición de pena de prisión.
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